martes, 22 de noviembre de 2011

Somos lo que enseñamos

Como toda regla tiene su excepción, un poco de realidad dentro de la publicidad nunca viene mal.

martes, 15 de noviembre de 2011

FAMILIA

"No ha querido vivir quien no quiere morir" "Vives con tu familia? Bien, porque un hombre que no vive con su familia no es un hombre".

La familia, aquello que no se elige pero que acabara determinando tu manera de actuar, tus pensamientos, etc. Me considero una afortunada porque ni eligiendo hubiese tenido una familia mejor. Cuesta poner nombre a los sentimientos, quizás es porque nunca lo he hecho, siempre he sabido que estaban ahí, que me quieren, que les quiero, pero nunca he llegado a profundizar tanto. Me asusta enfrentarme a este ensayo, es fácil escribir de la juventud, de vivir en paz, tan solo tienes que desarrollar una idea, pero ahora, no es una idea, voy hablar de la dimensión que para mí es más importante en una persona.

De mis padres tan solo puedo decir que siempre nos han dado exceso de amor y cariño, han pecado de darnos todo incluso antes de pedirlo, se suele decir que los padres crían y los abuelos malcrían, en este caso mis padres han sido como unos segundos abuelos.

Mamá, la palabra más bonita que jamás pronunciare. Madre joven, trabajadora, vida ajetreada, alto cargo, trabajo para casa, despertador que suena a las siete, jornadas laborales de diez horas, viajes largos, sábados a la mañana para compra semanal, tardes de domingo de cine y palomitas, viajar una pasión, tardes de invierno de chocolate y punto de cruz, cuadros por toda la casa, tradicional, religiosa, dominio de ordenador, excesiva facilidad en el mundo jurídico, muy familiar.
 


Siempre has sido la mejor sensación, como un sexto sentido o una parte de mi cuerpo, saber que sin ti no soy yo, que soy un completo, un completo incompleto. La que me vio ganar y me enseño a perder, amiga , compañera, confidente. Una voz, un olor, una sonrisa, un gesto; mi madre. Por como me late el corazón cuando agarro tus manos. Sé que hay sentimientos que caducan con el tiempo, recuerdos que se borran, caras que se olvidan, pero nunca el de una madre, siempre serás la mejor sensación. Cada día has alimentado esta admiración eterna, una deuda que no cesa, un cariño incalculable y la mirada más dulce. Eso es lo que tú me has dado y yo espero darte para siempre.

De la relación de mis padres solo puedo decir que hay muchas formas de quererse, pero la suya es total. Un amor especial como hay pocos. Su amor ha podido con todo, es ese tipo de amor que hace aspirar a más...

En mi padre he conocido lo que es el sacrificio, la lucha constante, no abandonar nunca los sueños, perseguir aquello que quieres, mantener la esperanza en cada momento. Ejemplo de trabajo, de constancia, de vivir por y para los demás. Tantas veces como hubiera desfallecido, me fije en él. Él es el culpable de que me encuentre en tercero, él mismo que me hizo entrar al examen de Romano, él que se ha levantado a las cinco de la mañana para recogerte cuando he salido de fiesta, él que me ha corregido cuando me he salido del camino, él que siempre ha estado ahí, conmigo.

De mi hermano solo puede decir que es la nobleza personificada, en él no hay ni el más mínimo índice de picardía. La tranquilidad en persona, nunca un paso más deprisa que el otro, nunca uno hacia atrás. Apasionado por el mundo de las Letras, estudiante de Comunicación, Master en Guión y Dirección de Cine, premio Kino Unav al Mejor Corto 2011, premio Unav al Mejor Relato, finalista a mejor director navarro. Como veis, todo son palabras de orgullo. Saber que tiene un sueño y lo persigue, que no abandona, que cada día es mas fuerte. Que como bien nos prometimos “ Si estamos atravesando un infierno, seguiremos caminando”. Y eso es lo que hemos hecho siempre.

Nuestra vida ha estado marcada por una intensa lucha contra el cáncer, lucha diaria, aquellas luchas que no puedes abandonar, una de esas luchas que te quedas en la batalla o sales de ella, pero siempre batallando. Pronto aprendimos que es la esencia de la vida, discernir y conjugar entre lo realmente importante y lo que no, aprendimos que los problemas se quedaban en la puerta, que a casa siempre hay que llevar una sonrisa. Ha sido esas sonrisas, las que han hecho que no quiera dejar mi casa nunca, no imagino el día que salga de ella para siempre, pues ha sido la cura de todos los males.

Consciente de que nunca conoceré felicidad más grande que la que he respirado en esas cuatro paredes, tener la seguridad de cruzar la puerta y saber que no hay gritos, tampoco discusiones, sino las mayores sonrisas, la mayor complicidad. Quizás ha sido esta madurez, madurez precoz por circunstancias, la que a pesar de todo nos ha hecho ser más felices, más especiales


De manera casi inevitable hemos sufrido, como en todos las familias, siempre nos peso la incertidumbre de que sería sin uno de nosotros para siempre. Incertidumbre que nos ha acompañado día a día, ladrona de noches, espina de buenos momentos. Es curioso que a pesar de esto, he tenido la infancia más feliz del mundo, es curioso las distintas maneras de afrontar los problemas que tienen las personas, como a pesar de dificultades se puede ser feliz o como puedes hundirte. Seguramente ese hubiese sido mi camino, sino contase con el ejemplo y el apoyo que hemos tenido entre nosotros.

Muchas veces me he repetido cuantas cosas materiales cambiaría por otras, como me gustaría tener un poquito menos de unas cosas y un poquito más de otras, como me hubiera gustado poder tener yo esa elección. Pero no es así, hay historias que elegimos y otras que nos eligen. Esta es mi historia, y es la mejor decisión no tomada, siempre seréis la mejor sensación.




VIVIR EN PAZ

´´Escucha ve y calla si quieres vivir en paz¨ así lo anunciaba Lucio Anneo Séneca.

Vivir en paz resulta complicado teniendo en cuenta el estado de cambios al que nos sometemos, siempre queremos más y son esas expectativas de alcanzar algo mejor las que no nos dejan vivir en paz. Nos convencemos a nosotros mismos de que la vida será mejor después de terminar la carrera, después de conseguir trabajo, después de tener un hijo y después de tener otro. Luego nos sentimos frustados porque nuestros hijos no son lo suficientemente grandes y pensamos que seremos más felices cuando crezcan y dejen de ser niños, después desesperamos porque son adolescentes, difíciles de tratar.

Luego pensamos que nuestra vida será completa cuando a nuestra pareja le vaya mejor, cuando tengamos un coche mejor, cuando nos podamos ir de vacaciones, cuando consigamos el ascenso,o cuando nos retiremos Se nos olvida que no hay mejor momento para ser felices que ahora mismo, la felicidad es un trayecto, no un destino. No hay un luego , ni un camino para la felicidad, la felicidad es el camino y es ahora.

Vivimos con la idea de que venimos al mundo para ser felices, y nos frustamos cuando no lo somos, pensamos que es temporal y que de un momento a otro seremos felices, que tendremos el coche del vecino, un novio que nos quiera tanto como el de nuestra amiga Laura o una jornada laboral de seis horas. Es curioso cómo de manera inconsciente elaboramos la lista de la felicidad, simulando una carta a los Reyes Magos y cuando falta algo de esa lista ya resulta imposible ser felices. También resulta curioso como casi todo lo que aparece en la lista son cosas materiales.

El problema no es que falte un factor de la lista, sino saber ser felices sin él, cambiar la actitud de inconformismo ante la vida, saber apreciar lo que tenemos y ser felices con ello. ¿ Quién ha dicho que la felicidad sea esa lista? El problema radica en el tipo de sociedad consumista en que nos estamos convirtiendo, ahora el tener un mal día es concepto de ir de compras, y eso ya nos vuelve hacer felices.

Sin embargo, es de apreciar que son las personas enfermas, o las personas que se encuentran en un bache, justo esas personas que no tienen completa su lista , las que mejor aprecian la vida , las que tienen el verdadero significado de felicidad y las que más felices son. Cuando pierdes a una persona importante es cuando aprecias el valor que tenía una simple conversación con ella, el valor de una voz o de un simple te quiero, el valor de escuchar su risa o el olor de su pelo. Entonces cambiarías todo por volver a casa y encontrar su abrigo colgado en el perchero, te das cuenta de lo feliz que eras antes y te repites que nunca más.vas a poder serlo y de nuevo se te vuelve a olvidar que es la vida , se te olvida apreciar lo afortunado que has sido de compartir años de vida con esa persona, y se te olvida apreciar a los que tienes alrededor y a los que estan por llegar.

Nada esta garantizado en la vida, al fin y al cabo nadie dijo que fuera fácil. Vivir es crecer. Asimilando lo que se queda atrás y construyendo lo que se tiene por delante, pero ante todo viviendo el presente aunque de vértigo.

Nuestro incoformismo ha dejado atrás el antiguo proverbio de que ¨una alegría dispersa cien pesare¨hoy en día necesitamos cien alegrías para compensar un pesar. Es esta situación la que nos crea un malestar y no nos deja vivir en paz. Al final acabamos frustados, estresados, tomando una actitud de paso por la vida , desperdiciando nuestros días. No busques la felicidad, no la idealizes como un algo inacanzable,no desperdicies un día más de tu vida.

He vuelto a casa el abrigo no esta en el perchero, abro mi diario y comienzo así: Hoy va a ser un buen día…..

JUVENTUD

Juventud, palabra sujeta de muchas connotaciones. Ciertamente cada vez que se dice la palabra juventud parece que va sujeta a ni-ni, irresponsable, desagradecido. Parece que se ha perdido la noción de jóvenes responsables, estudiantes, trabajadores y todo ello compaginable con la educación.

 

Es cierto que hay un sector de jóvenes que siguen en su casa a los 30 años, es cierto que hay jóvenes que jubilan a sus madres más tarde incluso que lo que ahora lo quiere hacer Zapatero, y es que muchas veces parece que ser madre conlleva ser cocinera, señora de la limpieza y Caja de ahorros. Es cierto que muchos jóvenes se quejan y se excusan en no encontrar trabajo, y ahora les digo, si tu padre tiene trabajo con 30 años más que tú, como no lo vas a tener tú que puedes rendir el doble que él, es que muchas veces sucede que quieren que el trabajo venga a buscarte a la puerta de casa o que llegue de París como la cigüeña.

Pero también es cierto que otro sector de jóvenes son emprendedores, capaces de compaginar estudios con trabajos y ser conscientes de tener la oportunidad de estudiar más que un deber es un privilegio. Me uno a ese grupo de jóvenes que han conocido la responsabilidad desde el minuto uno, que también tienen preocupaciones ya que no siempre el dinero da hasta fin de mes, o muchas veces se necesitan días de 48 horas.

Jóvenes que aprenden de fracasos, cansados de titulares como “ detenidos 3 jóvenes en la madrugada del sábado”, “ nuevos casos de vandalismo”, “ dos peleas de jóvenes que acaban en el Hospital”. Sin embargo, multitud de asociaciones están repletas de jóvenes que prestan su voluntariado, lo que pasa que hoy en día se tiende a dar mas importancia a lo que más conmoción causa, esto explica las 4 página de sucesos frente a la de cultura.
Padres que se quejan de “ cuando me sacare a mi hijo de encima “ , perdona te sacarás a tu hijo de encima cuando tú quieras, o la típica frase de “ cría hijos para que luego te echen de casa”, no culpes a nadie de que tu hijo sea quien te eche de casa, porque quizás la culpa es tuya, a mí me da igual que mi hijo tenga 20, 30, o 40 años, siempre sabre cual es su sitio y cual es el mío. Luego se culpa a la sociedad, pero ¿ qué vamos hacer si han nacido ahora? No le puedes pedir a tu hijo que vaya a lavar al río, que no se compre la play station y se compre una peonza o que se compre ropa cada diez meses, pero si puedes exigirle que o se estudia o se trabaja, que la casa no es una pensión y que hay que colaborar.
Nosotros no estuvimos en la Guerra Civil, ni en mayo del 68, ni corrimos delante de los grises, no votamos la Constitución y nuestra memoria histórica comienza con las olimpiadas del 92. Por no vivir activamente la Transición se nos dice que no tenemos ideales y sabemos de política quizás más que nuestros propios padres, ya que hemos aprendido a vivir con ella.
Si comparamos la infancia de nuestros padres con la nuestra nos daremos cuenta de que muchas cosas se han perdido. Ellos no tuvieron puertas con protecciones, armarios o frascos de medicinas con tapa a prueba de niños. Los columpios eran de metal y con esquinas en pico. Salían de casa por la mañana, jugaban todo el día, y solo volvían cuando se encendían las luces. No había móviles. Se abrían la cabeza jugando a guerras de piedras y no pasaba nada, eran cosas de niños y se curaban con mercromina (roja) y unos puntos y al día siguiente todos contentos. Iban a clase cargados de libros y cuadernos, todo metido en una mochila que, rara vez, tenía refuerzo para los hombros y, mucho menos, ruedas. Estaban siempre al aire libre, corriendo y jugando. No cabía la posibilidad de quedar con tus amigos por tuenti, ni que decir de el invento Black-Berry.
Lo más triste que me resulta al escribir este ensayo es la propia reflexión que me lleva a pensar que el concepto de infancia cada vez se va perdiendo o viene asemejado a un concepto de infancia -moderna. Niños que soñaban con dar dos puntapiés a un balón, que castigarles en casa era el peor de los castigos, y sin embargo ahora las propias casas se han convertido en una sala de recreativos, de la play del salón , a los juegos del ordenador, a los juegos del móvil, al home cinema y del home cinema al teléfono para pedir comida para entregar a domicilio.
Me apena pensar en la infancia de mis hijos, como también se que intentare que sea lo más parecida a la mía, sin que se les robe esa esencia de lo que son los llamados “ aquellos maravillosos años”. A la vez que siempre tendré claro que cada persona puede elegir, estudiar o trabajar, así como que estudiar y que querer ser, cuando mis hijos lo encuentren no seré nadie para decirles que no a lo que ellos quieran hacer de sus futuro, más que una consejera. Pero a la vez que tendrán claro que colaborar es con la palabra que se va a encontrar todos los días, que el esfuerzo no esta reñido con la diversión, que simplemente hay que hacer cada cosa en su momento.

Get up.



Os dejo aquí el corto dirigido por mi hermano, espero que saquéis unos minutillos para verlo y os guste.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Un llanto de alegría....

Si estás atravesando un infierno, sigue caminando." Winston Churchill."
Se puede lograr, luchar por vencer:)


Ha vuelto. Ella está de camino. Pronto será como antes, como ha sido siempre; o quizás ya lo sea.
Está dejando atrás los miedos, la rabia; está arrojando al mar la falta de autoestima, la vanidad; está olvidando. El tiempo lo cura todo. El tiempo tapia la angustia, el llanto; ayuda a que cicatricen incluso las heridas más profundas.
Ella está aquí,
preparaos para vivir
es tu vuelta,tu vuelta a sonreir .